Tuesday, January 13, 2009

Perestroika


Aquí estoy finálmente. Sólamente a cuatro pulgadas de tu boca.
Mi mente me esta matando, no me deja, no me deja. Un hombre sabio de barba me dijo que siguiera mi corazón pero no puedo, no me enseño a pelear contra mi marco mental. Que pelea tan mas temeraría esta ardiendo profúndamente bajo mis poros.

Cómo puedo pelear contra esta?
Cómo me puedo hundir dentro de mi mismo?
Tiene cuerpo?
Un cuerpo roto.

La perestroika toma fuerza y juega trucos en mi mente, alucinaciones sin ácido y sin drogarse.
Las cosas que realmente importan, ven, enséñame.
Cuerpo comprimido, estrés mental, pensamientos extraviados. Y porqué no?, también nervios estomacales, bloquéos mentales y una cucharada de pesar.
Caminando por los bordes de esta calle que ha visto todo, las sirenas me han cantado y me han dicho que estoy perdiendo mi camino.
Me lo estoy guardando.

Dos cafés y un sofá. Servilletas, orillas de pan fueron el tema de conversación, no duró mucho para el momento en que nuestros dedos se acostaran suávemente juntos, el uno al otro, llevandonos diréctamente a una pequeña carrera de labios, cruzando media-agua.

Solía pensar que debía dejar ir todo, solía saber y supongo que debo cortar los lazos y cadenas que me atrapan, de cualquier manera, hablé y no me cayé.
Hasta ahora he pagado cuentas grandes por mi silencio y por ello. Me dirigo extraviado, estos cambios traerán mucho sufrimiento. ¿Porqué?, pues, mi excusa será estoy ganando la vida otra vez, y así, probablemente me podré presentar con modales dignos, a decirte que quisiera que fueras mia.

No comments:

Post a Comment

Copyright

The articles written here are protected by the law. If you'd like to use one of those, please put the name of the author and/or a link to this blog.
Powered By Blogger